Mi experiencia en EF Dublín
Todo empezó en enero de 2018 cuando decidí viajar con EF. Elegí viajar a Irlanda porque no es un destino muy común, además de que me interesaba muchísimo su historia y los paisajes que tiene el país.
Llegó el 29 de junio y la ansiedad por querer estar allá era enorme. Ese día me encontré con las personas que iba a viajar en Ezeiza (porque hice un viaje grupal). Teníamos que esperar un par de horas para que el avión salga, entonces nos pusimos a charlar para poder empezar a conocernos.
Apenas llegamos a la residencia nos recibieron con mucha buena onda. La gente de staff nos ayudó a instalarnos e hicimos un pequeño recorrido. Ese mismo día conocimos un montón de chicos y chicas de muchas partes del mundo.
Al otro día tuvimos orientación en la escuela donde conocimos a varios directivos y muchísima gente más. Cuando terminamos, nos llevaron a hacer un pequeño tour caminando por la hermosa ciudad de Dublín y algunos de sus lugares más importantes como Trinity College, Grafton Street, etc. El lugar nunca dejó de sorprenderme, siempre había algo nuevo por conocer. No pude haber elegido un mejor lugar para llevar a cabo esta experiencia. Desde sus hermosas calles, castillos, las excursiones a lugares increíbles y la gente que es súper amable, Dublín tiene un lugar enorme en mi corazón y me dejó muchas cosas que no voy a olvidar.
Además de todo lo que aprendí sobre el país y académicamente, también hice muchísimos amigos con los que sigo en contacto. Personas de España, Italia, Francia, Suiza, Rusia también me enseñaron muchísimo e hicieron que el viaje sea aún mejor.
Hoy puedo decir que haber viajado con EF fue la mejor decisión que tomé. Aprendí tanto en las clases que eran súper divertidas como hablando con locales y haciendo otras actividades. No hay dudas de que haría este viaje de nuevo!