Live the language
Cuando entramos a la página de EF Education First, una de las primeras cosas que leemos es: “Live the languague”, pero, ¿qué significa esta frase?
Cada uno, en su respectiva provincia, muy probablemente ha estudiado ingles por uno, cinco o diez años y en algunos casos más; ya sea en un nivel inicial, primario, secundario y probablemente universitario. ¿Se acuerdan en que consistían estas clases? Reading, Use of English, Writing Listening y Speaking, todo en un salón de cuatro paredes.
Pero, ¿es está manera tan estructurada la más apropiada para aprender un idioma? Mi experiencia en el exterior me dice que no. Al idioma hay que vivirlo, pero no solo visitando y recorriendo las calles de un nuevo país, sino, a través de clases. Pero no como las mencionadas anteriormente, sino, como aquellas que se dan en EF.
Tuve la suerte de estar en algunas clases llamadas “Hot Topics”, en las que para mi sorpresa, tocábamos temas que acá, en la Argentina, muchas veces se hace difícil hablar. Debatíamos, a través de una estructura formal de debate, temas tan “chocantes” como lo es racismo, la ideología de género, usos de la energía nuclear, entre otros. Uno estaba tan metido en las diferentes opiniones e ideas que se iban desarrollando, que por un momento olvidabas que la discusión era en inglés, y ahí, en ese preciso instante, es cuando uno comienza a vivir el idioma, cuando tu cabeza cambia, tu frontera se expande y tu nivel en el idioma aumenta exponencialmente.
Son clases que te marcan para todo la vida, y si, tal vez pienses que soy exagerando, pero primero déjame contarte esta parte de la historia. Quince de enero, aniversario del nacimiento de Martin Luther King Jr; llegué a mi curso junto con mis compañeros y nos encontramos con que la tarea del día era salir a la ciudad y preguntarle a nacidos en EEUU sobre qué impacto había tenido en la vida Americana, para ellos, MLK. Cinco fueron los entrevistados por mi grupo, tres no contuvieron el llanto a la hora de expresarse.
Respondiendo entonces la pregunta que nos hicimos al principio, vivir un idioma es más que estar en un aula e incluso más que viajar al extranjero; vivir un idioma es superar la nacionalidad impresa en tu pasaporte, sumergirte en la cultura del país anfitrión y poder conectar, de alguna u otra, con quienes allí residen, para nunca olvidar, que somos ciudadanos del mundo.