Irse de mochilero o hacer un curso de idiomas en el extranjero: ¿cuál es un mejor año sabático?
Viajar puede ser una de las mejores cosas que podés hacer con tu tiempo en este mundo. Abrirte a nuevas culturas te expone a ciudades y paisajes fantásticos, y te presenta a personas interesantes; también aprendés mucho sobre vos mismo. Tanto viajar con mochila como estudiar un idioma en el extranjero, son formas brillantes de ver el mundo, ¿cómo decidir cuál es el adecuado para vos? Por suerte, acá estamos para ayudar. Considerá este artículo como tu propia lista de pros y contras para ayudarte a descubrir cómo pasar tu año sabático antes, durante o después de la universidad.
Descubriendo nuevos lugares
Viajar de mochilero, literalmente llevar todo lo que necesitás para una aventura, significa que sos libre de conocer lugares y sin límites. Cuando es tan simple hacer la mochila y mudarse a otra parte, no hay necesidad de permanecer en un lugar por más tiempo del que tu capacidad de atención puede manejar. Es la forma más fácil de planear una aventura de viajes, descubriendo muchísimas ciudades nuevas y países, de la forma que quieras. Sin obligaciones que te guíen sólo a un lugar, tu próximo destino depende totalmente de vos. Si estás buscando marcar muchos de los elementos de tu lista de deseos, irte de mochilero es una manera segura de hacerlo.
Estudiando un idioma en el extranjero, con clases a las que asistir y una familia anfitriona para volver a casa, estás oficialmente vinculado a una ciudad. A medida que mejoren tus habilidades lingüísticas y tu conocimiento de la ciudad, vas a empezar a sentirte todo un local. Vas a tener tu bar favorito, amigos para salir y una gran intercambio cultural. Así, tu nueva ciudad y tu familia anfitriona se convertirán en tu hogar lejos de casa, pero eso no significa que estás atrapado. Con fines de semana y excursiones de un día, podés salir de la ciudad y adentrarte en los pueblos y la naturaleza que los rodean. Si estás estudiando en Europa, incluso otros países están a solo un par de horas en tren.
Conocer gente nueva
Como comunidad, los mochileros se encuentran entre los grupos más amigables, siempre listos para compartir historias y consejos de viaje sobre dónde estuvieron y hacia dónde van a después. Con todos los que se mueven en diferentes direcciones, vas a conocer a un número extraordinario de personas en tu viaje, especialmente si elegís compartir habitación, y casi siempre habrá alguien más dispuesto a salir a cenar o reunirse con vos ya sea para caminar, el viajar en bus o hacer surf, siempre tenés una familia.
Cuando se trata de estudiar en el extranjero, tus compañeros de clase se convierten en una segunda familia. En comparación con la mochila, los amigos que conocés mientras estudiás en el extranjero, no son solo tus amigos por una noche, son tus amigos de por vida. Y ahora solo estamos hablando de nuestros compañeros de clase: pasando gran tiempo en un lugar, hará que conozcas gente local que te mostrará todos los rincones ocultos de la ciudad y te a ayudar a expander tu red internacional. En general, si estás interesado en formar una relación más profunda con tus compañeros de clase y la gente local, estudiar en el extranjero es para vos.
Adquirir habilidades para la vida
Tanto como mochilero como estudiante, está garantizado que vas a tener tu tiempo en el extranjero con un nuevo conjunto de habilidades que te van a servir para toda la vida. Al vivir esta experiencia, te encontrás en un entorno emocionante en el que tenés que aprender rápidamente cómo comunicarte con nuevas personas, navegar por una nueva cultura y crear tu nueva vida en el extranjero. Estás a cargo de tu propia vida y tu independencia vuela. Al administrar tu propio tiempo, transporte, estudios y vida social, vas a volver a casa más confiado en tus habilidades. La ventaja adicional de estudiar en el extranjero es que vas a volver habiendo adquirido la increíble capacidad de hablar otro idioma y conversar con una comunidad completamente nueva de personas en su idioma nativo, algo que impresiona seriamente a los futuros empresarios y a directivos de la universidad.
Pero, independientemente de cómo se vea tu futuro profesional, lo que tenés que decidir a la hora de elegir es cómo querés que sea tu año sabático, lo que realmente querés obtener de tu tiempo en el extranjero. ¿Querés atacar tu lista de deseos, ver muchas ciudades y conocer a mucha gente? O, ¿querés aprender un nuevo idioma, hacer amigos para toda la vida y vivir el idioma junto a los locales en una ciudad que realmente conocés? De cualquier manera, podés viajar y, como dijimos al principio, eso es prácticamente lo mejor que podés hacer con tu tiempo en este mundo.