Guía Básica para Viajar por tu Cuenta

Por cada persona a la que le encanta viajar sola, hay otras 20 que antes preferirían caminar sobre brasas. A estas personas, la idea de viajar solas les llena de incertidumbre. Sin embargo, si te gusta irte por tu cuenta, tenés que saber esto: viajar solo no es tan aterrador, difícil o imposible como pensas. De hecho, con un poco de planificación, puede llegar a ser la mejor experiencia que hayas hecho.

Dónde y cuándo ir

Trazá un plan | Antes de apresurarte y comprar los primeros billetes de avión que encuentres, sentate y pensá en el tipo de viaje que queres hacer. Imaginate haciendo tu viaje ideal. ¿Dónde estás? Tal vez estés en una ciudad costera, una ciudad cosmopolita como Londres o Sídney, haciendo senderismo en Canadá, probando la comida local en Japón, estudiando en el extranjero o haciendo un recorrido en bici por Italia. Otra idea es escribir todos los países que te gustaría visitar a lo largo de tu vida y resaltar aquellos que hagan que se te acelere el pulso y que te parezcan adecuados para visitar sin compañía.

Decidí cuándo | Después, analiza en qué temporada o época del año podes viajar. Si tenes limitación en cuanto a fechas para hacer el viaje (quizás por tus estudios o trabajo), miralo desde una perspectiva positiva. ¿Qué pasa si solo podes viajar en invierno? Aprovechá que es fuera de temporada alta y viajá más barato.

Conocer gente nueva

Viajá de forma social | Para la mayor parte de los que viajan en solitario, el mayor miedo es sentirse solos durante el camino. Aunque en muchas partes del viaje vas a estar a solas, la verdad es que pocas de las personas que viajan por su cuenta se encuentran solas el cien por cien del tiempo y, a las que les pasa esto, es generalmente porque prefieren estar sin compañía. Si, por el contrario, vos querés conocer gente durante el camino, no te preocupes, hay muchas formas de hacerlo. Empezá considerando opciones más sociales de alojamiento, como Couchsurfing (donde podés encontrar alojamiento con anfitriones locales) o alquilá una habitación en la casa de un anfitrión de Airbnb.

Estudiá en el extranjero | Si una de tus prioridades es conocer gente, otra idea es estudiar o hacer un curso de poca duración en el extranjero. ¿Te gustaría aprender un idioma extranjero, buceo, cocina, baile o fotografía? El inglés se enseña en todo el mundo (¡imaginate con tus nuevos compañeros de clase en Australia, el Reino Unido, Irlanda, los Estados Unidos, Nueva Zelanda, Malta, o Sudáfrica!), y anotarte en un curso es una manera segura de hacer amigos con otros estudiantes que, por lo general, van a tener una edad similar a la tuya y van a compartir  con vos intereses en común. Otras actividades –como bailar salsa en Colombia, dar clases de cocina en Tailandia, hacer surf en Australia, o taekwondo en Corea del Sur– se podrían adaptar mejor a ti. Aparte de los beneficios de hacer amigos con personas de ideas afines, podrás permanecer durante más tiempo en un mismo destino y llegar a conocerlo a fondo.

El equipaje

La regla básica más importante a la hora de hacer el equipaje es hacerlo ligero. Cuando estás a punto de irte para estar afuera durante un mes o más, esto parece una tarea casi imposible, pero haciendo unos pequeños cambios es más que posible.

Sé selectivo | Artículos de aseo, ropa, dispositivos electrónicos, etc., elegí lo que vas a llevar. No lleves más ropa que la que puedas usar durante una semana y asegurate de elegir prendas que se puedan combinar. En cuanto a los artículos de higiene personal, lleva solo versiones mini, vas a necesitar comprar algo en tu lugar de destino, especialmente si te vas a quedar más tiempo (y lo mismo se aplica para la ropa). Por último, no llenes la mochila con aparatos electrónicos innecesarios. El mundo está ahora muy conectado y, al haber cibercafés y wifi en los albergues y cafeterías, no necesitas llevar todos tus dispositivos. Si estás pensando en estudiar en el extranjero, considerá la posibilidad de llevar tu laptop; sin embargo, los que viajan solos moviéndose de un lugar a otro pueden arreglarse con un smartphone o una tablet pequeña.

Por encima de todo, ¡acordate que no te vas a ir a Marte! Cualquier cosa que se te pueda haber olvidado –como el cargador del teléfono, artículos de higiene, medicamentos sin receta o ropa– se puede comprar en tu lugar de destino.

Transporte

Una de las ventajas de viajar solo es la de poder cambiar de destino en cualquier momento, sin tener que consultarlo con un compañero o grupo de viaje. Pero, ¿cómo moverse? Los trenes, autobuses y aviones serán tus principales medios de transporte. Para elegir uno, tené en cuenta el grado de flexibilidad y comodidad que necesitas.

Subite al tren | Los trenes, especialmente en Europa, te permiten recorrer cómodamente tanto distancias cortas como largas para desplazarte en la zona euro, dentro de cada país y entre países. Pero como ir comprando viajes individuales puede ser demasiado caro, es mejor comprar un billete específico para un país o período determinado de Eurail o Interrail (los no europeos viajan con Eurail). También se puede viajar en tren en Asia, Australia y otros países: para informarte sobre rutas internacionales de tren, podes visitar Seat 61, donde podes  encontrar toda la información que necesites para viajar en tren.

Colectivo | Desplazarse en colectivo en Europa, Australia y Nueva Zelanda es otra opción para los viajeros que quieren viajar por varios países o regiones. La ventaja de usar estos servicios es que vos decidis cuánto tiempo te vas a quedar en cada destino antes de irte al siguiente. La desventaja es que las rutas solo pasan por un número determinado de paradas, lo que significa que no es posible tener una flexibilidad total si el lugar que queres visitar no está incluido en la ruta. (Hay un montón de compañías que ofrecen estos servicios, ¡así que Google va a ser tu amigo! Solo tenes que buscar “viajar en autobús + país” para comparar.)

Volar | otra opción es volar. En Europa, se pueden encontrar fácilmente vuelos baratos con compañías aéreas de bajo costo, como Easyjet, Ryanair y Vueling, y comparando en línea precios de vuelos (probá en Skyscanner, Momondo y Kayak). Volar es la forma más rápida de viajar, aunque trasladarse al aeropuerto, facturar y pasar por aduana puede llevar más tiempo que un viaje en tren. Una desventaja importante de volar, sobre todo en las líneas aérea de bajo costo, es que normalmente no se permiten cambios ni reembolsos de los billetes y, por lo tanto, hay que tener claro el destino y las fechas antes de reservar. Además, a diferencia de viajar en tren y colectivo, hay que tener en cuenta los límites de peso en el equipaje: evitá este problema llevando poco peso y viajando solo con equipaje de mano (consejos para hacer la valija como un experto).

Seguridad

Aunque la seguridad puede ser una de tus mayores preocupaciones cuando viajas por tu cuenta, el hecho es que la mayoría de los países no son menos seguros que la Argentina, ¡y la gran parte de gente que vas a conocer será  maravillosa! Sin embargo, para calmar tus nervios (y los de tus papás), recordá que es fácil permanecer a salvo durante el viaje. Seguí estas reglas básicas:

Hacé que la gente sepa dónde estás | Si estudias o vivís en el extranjero, mandá tu dirección en el extranjero a tu familia y tenela a mano para tu uso en un portátil o anotada en tu teléfono. No olvides informar en tu casa de tu itinerario aproximado antes de irte, así como de los cambios que hagas sobre la marcha.

No tengas los objetos de valor a la vista | No uses joyas, cámaras ni dispositivos electrónicos caros. Mejor aún, no te los lleves. Mientras, tratá de llevar con vos la plata y otros objetos valiosos (nunca en un bolsillo) y no dejes de vigilar tus pertenencias ni las pongas sin cuidado en el asiento de al lado. Más que nada, no hay necesidad de llamar la atención hacia tu persona ¡ni de tentar a los carteristas para que te roben!

Dividí tu plata | No lleves nunca con vos a la vez toda tu plata en efectivo o tarjetas. En vez de eso, dejá al menos parte en tu habitación y llevá con vos únicamente la plata que necesites para el día. En el mismo sentido, escaneá tu pasaporte, tarjetas y otros documentos de identidad y enviatelos a vos mismo o a un miembro de tu familia para tener una copia por seguridad. Estos simples consejos van a evitar que pierdas el tiempo y la cordura si se pierden tus objetos valiosos mientras estás viajando y necesitás reemplazarlos.

No te arriesgues innecesariamente | Cuando estabas en casa, ¿caminabas a la noche por un barrio oscuro y desconocido a solas? Mucho de lo que consideramos «peligroso» se puede evitar si no actuamos precipitadamente y confiamos en nuestro instinto. Para evitar riesgos innecesarios, no pierdas de vista las bebidas en ningún momento, no camines a solas por la noche, vestí apropiadamente según las costumbres locales y no aceptes la propuesta de un desconocido para hacer una excursión o visita extraña.