Cómo sobrevivir a un viaje largo
A todos nos encanta viajar; pero hay veces en las que las escalas largas o vuelos interminables pueden resultarnos muy molestos. El verano pasado estuve 11 horas en el aeropuerto de San Pablo esperando que saliese mi vuelo; para el momento en que embarqué ya no sabía que más hacer. La experiencia me enseñó que hay una serie de cosas que son infaltables a la hora de viajar:
1. Entretenimiento
Si son aficionados de la lectura, tener en el bolso uno o dos libros nunca está demás. En particular, siempre llevo conmigo mi Kindle, ocupa poco espacio y tiene capacidad para almacenar muchos títulos.
Algo que me encanta hacer algunas semanas antes de viajar es preparar una playlist de música relacionada con mi destino; por ejemplo, podés practicar francés escuchando La vie en rose camino a París. Tengan en cuenta las horas que van a estar despiertos y armen otras listas donde pueden incluir música tranquila o algo movido para no aburrirse.
¿Estás muy enganchado con una serie? No te preocupes, Netflix ahora tiene habilitada la opción para descargarte series y peliculas en tu celular o tablet. Asi podés hacer binge watching de esa temporada que te faltaba.
2. Ropa
Todos sabemos que los jean son la prenda más práctica que existe; ahora, ¿es la más cómoda? Después de un viaje largo, les aseguro que no van a querer verlos más. Les recomiendo esos pantalos sueltos que se pusieron de moda; no son para nada elegantes pero hacen la diferencia en cuanto a comfort.
Lo mismo es aplicable a la otra ropa: remeras sueltas y zapatos bajos. Acuerdense que en los aviones hay aire acondicionado así que llevense un saco o campera (no siempre las frazadas que te dan son buenas). Con respecto a bijouterie, aprendí que cuanto menos tengo encima menos me tengo que preocupar que me pierda algo mientras estoy de acá para allá; y además tengo la paranoia de que hacen que suene el detector de metales de seguridad aeroportuaria.
Por último, los accesorios infaltables: la almohadita y el antifaz para dormir.
3. Snacks
¿A quién no le agarró hambre esperando embarcar o en el medio del vuelo? Los precios de los aeropuertos son prohibitivos asi que me acostumbré a tener chicles, un paquete de galletitas, frutos secos, etc. No les van a hacer problema si son productos cerrados. No se lleven botellas de agua o gaseosa, no las van a poder pasar por seguridad.
PD.: Para las fashionistas que no les gusta llegar a destino toda informal, pueden llevarse un cambio de ropa y zapatos para justo antes del aterrizaje; además de un kit de maquillaje. Ojo con la restricción de los 100ml para cremas y líquidos.