Cómo mantener una relación a larga distancia: 11 consejos
Enamorarse (en este caso con una persona, no un lugar) puede ser una de las tantas consecuencias de viajar y estudiar en el exterior. Pero después de volver, es un desafío evitar que la distancia física no se convierta en una emocional. Por supuesto, no tenés que depilarte las piernas todos los días ni limpiar tu departamento todo el tiempo, pero tomará determinación, optimismo, y esfuerzo convertir tu relación a larga distancia en una larga historia de amor.
Sin embargo, nada es imposible y estos consejos ayudarán a que tu romance florezca sin importar cuantos kilómetros los separan. (Lo dice una profesional en el tema – un poco de esfuerzo hace una gran diferencia).
1. Encontrá el mejor momento para comunicarte (regularmente)
Aunque escribir mensajitos y mandar emails funcionan 24/7, a veces es necesario hablar y obtener una respuesta inmediata. Dependiendo de la distancia, puede tomarte un tiempo encontrar el mejor momento para charlar, pero la práctica hace al maestro y los mensajes de voz graciosos pueden compensar malas conexiones. Y no, no importa si solo podés llamar los domingos a la mañana – hacer tiempo para el otro es lo esencial.
2. Encontrá los mejores medios para mantenerte en contacto
Una vez que hayas encontrado el momento para comunicarte, es importante que descubras los mejores medios. Por suerte, nunca fue tan fácil ni tan barato mantenerte en contacto con el mundo: WiFi es todo lo que necesitás para usar Skype, chat y mensajes. Asegurate que tu principal herramienta de comunicación sea de fácil acceso para ambos, y no olvides que usar diferentes medios hará de la comunicación algo mucho más emocionante.
3. Se creativo
Grabá un mensaje de voz durante la noche, escribí una carta, enviá postales o creá una compilación de música. Usá tu imaginación y encontrá nuevas maneras de demostrar que estás pensando en el otro. Esto no significa que tengas que vaciar tu cuenta en el banco: en vez de contratar un avión para que escriba poemas en el cielo, ¿por qué no esconder papeles con mensajitos tiernos durante tu próxima visita?
4. No evites peleas
Si se ven cada un par de semanas o meses, y tal vez hasta hablen diferentes idiomas, es fácil ignorar los problemas o dudas. Nadie quiere gastar tiempo discutiendo cuando solo tienen 48 horas juntos, pero evitar peleas y discusiones puede convertirse en algo perjudicial con el tiempo. Cuanto más hablen sobre lo que les molesta antes de que se convierta en grandes obstáculos en tu relación, mejor. Sin embargo, no peleen por mensajes o emails. Intenten discutirlo en persona o por teléfono apenas salga a colación. Habiendo dicho esto…
5. Hablen para solucionar
Intentá ser abierto y honesto sobre tus sentimientos siempre. Ignorar dónde está la otra persona o con quién estuvo el sábado a la noche puede llevar a que pienses de más y entres en un pánico innecesario. El hecho de que las redes sociales faciliten ver (o imaginar) cuánto se está divirtiendo el otro, empeora todo. Es importante que confíen uno en el otro lo suficiente para compartir sus pensamientos y sentimientos y encontrar maneras de sobrellevar los celos, ansiedad y dudas juntos.
6. Ve el vaso medio lleno
El hecho de que vivas tu vida cotidiana con una relación a larga distancia puede ser tanto una bendición como una maldición: puede que sientas que te estás perdiendo de hacer “cosas de pareja normal”, como pasar a buscar al otro por el trabajo o almorzar juntos. Sin embargo, también puede ser una gran ventaja el poder concentrarte en tus cosas: si estudias o trabajas por muchas horas, no tendrás que decepcionar a tu pareja cancelando los planes para cenar o ver una película, por ejemplo.
7. Hagan cosas aburridas
Cuando solo se ven un par de veces al año, todo se siente como vacaciones. En realidad, probablemente sean vacaciones porque te estás tomando tiempo fuera del trabajo o la escuela. No hay nada de malo con tomarse las cosas con calma, dormir de más y recorrer la ciudad, pero también es importante llevar a cabo actividades aburridas – cosas de todos los días como guardar la ropa lavada, hacer mandados o cortar el pasto. Tratar de divertirse juntos con las actividades mundanas es una verdadera prueba, ¿verdad?
8. Sepan cuándo se verán nuevamente
Dependiendo de cuánto tiempo y dinero cueste encontrarse, puede ser difícil que se vean. No saber cuándo será la próxima vez que suceda descontrolará tus sentimientos y tu vida. Asique es mejor intentar fijar una fecha lo antes posible luego de que vuelvas a tu hogar. De esa manera, podés tanto planear con tiempo como aprovechar de vuelos más baratos y promociones especiales, sin mencionar tener algo que esperar con ansias (las visitas espontaneas sorpresa son geniales también).
9. Hagan cosas juntos
Tiempos desesperados requieren maneras creativas para gastar tiempo juntos: aunque no estén en el mismo lugar al mismo tiempo, aún pueden hacer cosas juntos: gracias, video-llamadas. No tienen excusas para no compartir una pantalla y cocinar, comer, hacer compras, o ir a caminar juntos vía video-llamada. No olvides que también pueden mirar la misma película mientras hablan.
10. Tengan un recuerdo
A veces, no llamar o enviar un mensaje de texto compensará el hecho de que la otra persona no esté. Lo que puede ayudar a solucionar esto es usar su remera favorita o tomar con su taza favorita. Recuerdos como esos pueden ser cliché pero funcionan. Una muestra de su perfume favorito puede hacer que desaparezcan las diferencias horarias por un momento – no seas tímido y haz esto si estás desesperado por un poco de cercanía con tu pareja.
11. Encontrate con personas y visitá lugares
Cuanto más hablen y lleguen a conocerse, más mencionarán a personas o lugares que la otra persona no conoce. Siempre que haya oportunidad, preséntense – así sea con una foto o en persona – a la gente que suelen mencionar o con quienes suelen salir, y también los lugares más frecuentados. De esa manera, las conversaciones de todos los días se vuelven más significativas y tendrán la sensación de que pertenecen a la vida del otro, sin importar la distancia.