10 cosas para comer en Japón
Cuando la gente piensa en la comida japonesa, suele pensar solamente en sushi o en ramen. Sin embargo, Tokio tiene más restaurantes con estrellas Michelin que cualquier otra ciudad del mundo y en Osaka crean nuevas palabras debido al amor que sienten por la comida. Por todo esto, se podría decir que Japón es el centro mundial de la gastronomía. Una de las razones que explican la extraordinaria cocina del país es que su tradición culinaria gira en torno al umami, el quinto sabor: umami significa «gusto agradable, rico» y es la razón (científica) de por qué (casi) todo el mundo prefiere que el bacon y las papas fritas tengan kétchup. Básicamente, realza el sabor de muchos alimentos; dulces, amargos y de todo tipo. ¿Quién no quiere comer en un país que tiene el ingrediente (secreto) para que todo tenga mejor gusto? Te voy a dar diez motivos riquísimos para que te embarques en una aventura culinaria en Japón.
1. Sushi
El sushi puso a Japón en el mapa gastronómico, así que es justo ponerlo en primer lugar. Las pequeñas bolas de arroz frío datan del siglo IV a. C, y se usaban para conservar el pescado. Hoy en día son la comida favorita para mojar en salsa de soja. Preparar el sushi es un arte y lleva décadas convertirse en un verdadero maestro del sushi: podés pasar años aprendiendo solamente cómo hacer bien el arroz. El mejor sushi lo podés encontrar en Ginza (Tokio) y en los puertos pesqueros del país, pero también podés ir a un kaiten-zushi, uno de los muchos restaurantes en los que lo sirven en un transportador de banda, que son más accesibles.
2. Tempura
En el siglo XVI, los misioneros jesuitas portugueses desembarcaron en Nagasaki e introdujeron en Japón el revolucionario método de freír la comida. Los japoneses lo adoptaron y empezaron a freír mariscos y verduras, a los cuales primero recubrían con una masa ligera. Este oishii o aperitivo es perfecto para acompañarlo con arroz, noodles o para una barbacoa.
3. Ramen
Esta sopa de noodles es uno de los platos más populares y baratos de Japón, así que tiene sentido que también sea el favorito de los estudiantes universitarios. El ramen de noodles es tan simple de hacer como rico: usa noodles de trigo, como los chinos (son amarillentos y se parecen un poco a los espaguetis), ponelos en caldo y poné encima rodajas de carne, algas deshidratadas y cebolla de verdeo. Mucha gente come ramen para el almuerzo, y en Japón se considera una comida rápida. Sin embargo, muchos restaurantes tienen su propia receta secreta, así que la experiencia puede ser única (umami) cada vez.
4. Soba
Soba, la palabra japonesa para el trigo musulmán, son noodles finos tipo espagueti hechos con, ¡sorpresa!, harina de trigo, lo que le da ese color gris amarronado característico. Los noodles de soba se comen mucho en Tokio y datan del Período Edo (1603-1868), cuando se hicieron populares entre los samuráis. Sobre los noodles se puede poner huevo, tempura y otros ingredientes, y se pueden servir calientes o fríos, con o sin caldo. Los noodles de soba fríos se comen con una salsa a base de soja llamada tsuyu y, después de probarlos, decidí cambiarme al Equipo soba caliente.
5. Udon
Seguimos con los noodles y ahora les voy a hablar de los noodles udon, los primos más gruesos de los noodles soba. El caldo es el hábitat natural de los noodles udon; por encima se pone cebolleta, tempura o tofu. Si pasás el tiempo suficiente en Japón, la gente te va a preguntar si sos una persona udon o soba, así que asegurate de probarlos todos y elegir los que más te gusten. De todas maneras, cuando comas ramen, soba o udon, tenés que sorberlos ruidosamente: se considera educado y una muestra de que te está gustando la comida.
6. Takoyaki
Los takoyaki son pelotitas de harina rellenas de calamar, repollo o camarones secos, y se sirven con salsa. Por todo Japón vas a encontrar muchos vendedores ambulantes y puestos de comida que venden takoyaki, y es perfecto para comer en el camino: tienen el tamaño de un bocado, porque se hacen en unos moldes especiales, y una forma redonda casi perfecta.
7. Onigiri
Los fans del anime seguramente reconocerán esto por Pokemon y Sailor Moon. El onigiri es una pelota de arroz cocido que se rellena de cosas saladas o agrias, como ciruelas disecadas, salmón o bacalao, y después se envuelve en alga deshidratada (nori). Podés encontrarlas en todo el país, incluso en supermercados.
8. Okonomiyaki
Okonomiyaki es una combinación de la palabra okonomi, que significa «a tu gusto» o «como lo quieras» y yaki, la palabra japonesa que significa «asado» o «cocido»: es una muy rica tortita que lleva varios ingredientes; yo probé una con queso, noodles soba, cebolla de verdeo, rodajas de ajo frito, cerdo, huevo y kimchi. Hay muchas formas de preparar y servir el okonomiyaki; cuando yo lo probé había una fila de cocineros que preparaban los diferentes pedidos y después se servían en una pequeña plancha para que no se enfriaran. Para comerlos se usa una espátula tipo cuchara, y el resto es historia.
9. Yakitori
El mejor acompañamiento para estas brochetas de pollo hechas a la brasa es una bebida fría. El yakitori se puede hacer con distintas partes del pollo, como los muslos, las alitas o el hígado, así que te recomendamos que no seas miedoso y pruebes todas las brochetas con las que te encuentres.
10. Katsudon
Riquísimo. Es un bol de arroz coronado con costillas de cerdo fritas y tortilla de huevo. El katsudon no solo es super rico, sino que se supone que trae suerte a los estudiantes, deportistas o a cualquiera que la necesite. La primer parte del plato, katsu, suena muy parecido a la palabra japonesa que significa «ganar» o «ser victorioso» (así que asegurate de comer katsudon antes de tu próximo examen. Si no conseguís una buena nota, por lo menos comiste algo riquísimo).
Imagen de Fox Wu, Flickr / Creative Commons